En el aula donde se aprende el español como lengua extranjera puede haber alumnos de distintas procedencias. Esto significa que los estudiantes pueden desconocer por completo las tradiciones y costumbres sobre el Año Nuevo de los países de sus compañeros. Esta celebración tan popular se presenta por tanto como una estupenda oportunidad para aprender nuevas palabras en español, otras costumbres y formas de entender el mundo. Hoy os proponemos algunos recursos para celebrar el Año Nuevo en el aula.
Redacción
Una de las actividades que se pueden proponer en el aula de ELE es la de realizar una redacción en español en la que cada alumno refleje las tradiciones más destacadas de su país para celebrar el paso de un año a otro. Es recomendable concretar algunos puntos básicos que faciliten la escritura del texto.
Los alumnos pueden escribir sobre tres temas en concreto: qué platos son los más típicos en el último día del año, si existen supersticiones en su cultura para atraer la buena suerte y si es frecuente la costumbre de vestir alguna prenda en particular.
Espacio de debate
Para poner en práctica la capacidad de expresión y fluidez oral se puede invitar a los alumnos a celebrar un debate en el que cada uno explique algunos argumentos sobre un par de cuestiones. Por ejemplo, se pueden plantear las preguntas: ¿por qué culturas tan diferentes celebran este evento? y ¿el inicio de un nuevo año significa la renovación de los acontecimientos del que concluye?
Las películas son un recurso muy eficaz para el aprendizaje de un idioma y parece oportuno visionar una dedicada a la Nochevieja o al Año Nuevo. Hay varias donde elegir en el mundo cinematográfico.
El docente puede escoger una película española o doblada al español que se adapte al nivel de aprendizaje de sus alumnos. La propuesta no solo significa compartir en el aula un momento más relajado, sino también la invitación a participar en un cinefórum posterior al visionado.
Ver una película es una actividad individual, pero el cinefórum es una experiencia que facilita el diálogo y propicia la comunicación compartiendo reflexiones y vivencias a tenor de lo visto en la pantalla.
Por tanto, no se trata simplemente de un entretenimiento, sino de un recurso educativo a través del cual se invita a los alumnos a la reflexión, la escucha y la participación.
Estas son algunas ideas, pero seguro que si eres docente puedes aprovechar un hecho tan popular como la llegada del Año Nuevo para proponer otras y generar interés y participación en tus alumnos. ¡Mucho éxito!